Familia Grau
Mayo de 2015
Mura - Cataluña
He recibido algunos mails de madres preguntándome si es posible hacer fotos con sus hijos pre-adolescentes o adolescentes, preguntándome si creo que quedaran bonitas o considero que ya es demasiado tarde para eso. Por esta razón he decidido compartir esta sesión con vosotros. Creo que estas imágenes responderan a todas esas preguntas e inseguridades. ¡Siempre es un buen momento para imprimir con luz esa complicidad que existe entre unos padres y un hijo. ¡Tenga la edad que tenga!
No os voy a mentir, son sesiones que tienen otro tipo de tratamiento, pero lo que he aprendido es a estar atenta a esos detalles que te transmiten los chicos y que te dan la clave para entrar en su terreno. ¡Ay, sí! ¡Al final todos son más buenos que el pan!
Tengo muchísima suerte de los clientes que tengo. La verdad es que es una de las cosas que más me gusta de mi trabajo, ese lazo que se crea entre una familia y el fotógrafo, es como una relación que empieza con un poco de nerviosismo para ambas partes, y al final, siempre fluye, porque en el momento en el que nos relajamos todos y el cliente entiende que lo que estamos buscando juntos es puro amor y nobleza.... ¡Ufff! ¡Es una conexión muy especial!
¡Ay!, cada día que pasa me gusta más y más esto de hacer fotos bonitas de ¡¡¡gente bonita!!!.